Al cumplirse 800 años del nacimiento de San Francisco, el
Papa Juan Pablo II lo declaró Patrono de los ecologistas. En los últimos 40 o 50 años, la palabra ecología se tornó muy conocida, pero, a
pesar que en épocas de San Francisco no existía, él tenía un profundo
conocimiento de su significado.
Francisco se convirtió en el primer humano preocupado por el equilibrio entre
animales, plantas y seres humanos. Fue el primer humano que se concibió a sí
mismo en relación con todas las cosas creadas, tenía un profundo respeto y admiración por todo lo que se hallaba en
la naturaleza. Francisco reconoció que las criaturas de Dios tenían una
interdependencia, y que romper los lazos que las unen es una grave falta. Hoy,
a 800 años, el mundo está en una verdadera crisis ambiental.
Decretado como el santo patrón del medioambiente/ ecología y
de los animales, los últimos años de la vida de San Francisco de Asís no sólo
fueron un intachable modelo de devoción religiosa, sino un ejemplar dechado de
una armoniosa existencia en la
Tierra. Él era amigo del hombre y de la bestia, admirador del
sol y la naturaleza y un pacifista en todo el sentido de la palabra. Estaba profundamente comprometido con el bienestar del
medioambiente y de toda la creación, a manera de un iniciante pionero nunca antes
visto.
Recomendaba encarecidamente a la humanidad mostrar respeto,
humildad y amor hacia los demás miembros seres vivos del planeta y sus
alrededores, y de igual manera, él esperaba lo mismo de la Creación.
San Francisco de Asís nació con el nombre de Giovanni di
Bernardone, llamado así por su madre en consideración de Juan El Bautista el 4
de octubre de 1181 en Umbría, Italia y Asís murió en 4 de octubre de 1226 a la edad de 44 años y
fue canonizado (convertido en santo) el 16 de julio de 1228 por el Papa
Gregorio IX
“Empiecen por hacer lo que sea necesario; luego hagan lo que sea
posible; y repentinamente estarás haciendo lo imposible.” San Francisco de Asís.
El legado de San Francisco puede ayudar a salvar nuestro Planeta. Su herencia
es enseñarnos a amar a todas las cosas, a las plantas, los animales, a las
piedras, a las montañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario